jueves, 7 de agosto de 2008

El caballero de brillante armadura


Hay una metáfora fabulosa en el libro que me encanta por lo útil que me ha resultado al estar viviendo junto a un marciano, la de imaginármelo siempre como mi "caballero de brillante armadura"...la cual hace alusión a la imperiosa necesidad que tienen los marcianos de ser reconocidos y apreciados por su venusina. Lo más importante para ellos es tener éxito en su iniciativa de servir y proteger a la mujer que aman. Si su venusina confía en él, él se encontrará motivado a hacer más por ella.

Podrá sonar exagerado, pero no lo es. Cuando una mujer brinda amor protector a un hombre en lugar de un amor confiado, puede estar saboteando su relación en forma inadvertida.


Esta es la metáfora de John Gray:

Imagínese a un caballero de brillante armadura que viaja por la campiña. De repente escucha a una mujer llorar de angustia. En un instante cobra vigor. Apura su caballo y corre hasta el castillo de la dama donde cae en la trampa del dragón. El noble caballero saca su espada y mata al dragón. Como resultado de ello, es recibido afectuosamente por la princesa.

Cuando las puertas se abren es bien recibido y festejado por la familia de la princesa y la gente del pueblo. Es invitado a vivir en el pueblo y se lo reconoce como un héroe. Él y la princesa se enamoran.

Un mes después, el noble caballero emprende otro viaje. A su regreso, escucha a su amada princesa que grita pidiendo ayuda. Otro dragón ha atacado el castillo. Cuado llega el caballero, saca su espada para matar al dragón.

Antes de blandirla, la princesa grita desde la torre: "No uses tu espada, usa este lazo corredizo, funcionará mejor".

Ella le arroja el lazo y le hace señas para darle instrucciones sobre la manera de usarlo. Él sigue en forma vacilante sus instrucciones. Lo lanza alrededor del cuello del dragón y luego tira con fuerza. El dragón muere y todo el mundo se regocija.

Durante la cena de celebración el caballero siente que en realidad no ha hecho nada. De alguna manera, por el hecho de haber usado el lazo y no su espada, no se siente muy digno de la confianza y admiración de la ciudad. Después del acontecimiento se siente levemente deprimido y olvida pulir su armadura.

Un mes más tarde emprende otro viaje. en el momento de irse con su espada, la princesa le recuerda que tenga cuidado y le pide lleve el lazo. De regreso a casa observa que otro dragón está atacando el castillo. Esta vez se precipita hacia delante con su espada pero vacila, pensando que quizás tenga que usar el lazo. en ese momento de vacilación, el dragón le echa fuego y le quema el brazo derecho. Confundido mira a la princesa que le hace señas desde la ventana del castillo: "usa el veneno -grita ella. El lazo no funcionará".

Le arroja el veneno, que él vierte en la boca del dragón y éste muere. todos se alegran y celebran, pero el caballero se siente avergonzado.

Un mes después, empende otro viaje. En el momento de irse con su espada, la princesa le recuerda que tenga cuidado y que lleve el veneno y el lazo. Él se siene molesto por sus sugerencias, pero los lleva por las dudas.

Esta vez en su viaje escucha a otra mujer angustiada. En el momento de precipitarse en su ayuda, su depresión desaparece y se siente confiado y vivo. Pero cuando saca la espada para matar al dragón, vacila nuevamente. Se pregunta: "¿Debería usar mi espada, el lazo o el veneno? ¿Qué diría la princesa?".

Por un momento se siente confundido. Pero entonces recuerda cómo se había sentido antes de conocer a la princesa, en aquellos días en que sólo llevaba espada. Con un estallido de confianza renovada se desprende del lazo y el veneno y ataca al dragón con su confiable espada. Mata al dragón y el pueblo de la ciudad se alegra.

El caballero de la brillante armadura nunca regresó a su princesa. Se quedó en la nueva aldea y vivió feliz por el resto de sus días. Finalmente se casó, pero sólo después de haberse asegurado que su nueva pareja no sabía nada sobre lazos y venenos.


**La imagen: Quijote y Dulcinea, colage digital de Loly&Bernardilla.

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